Diez tareas para un nuevo mundoAgencia boliviana de Informacion ABI “Permítannos, en este momento en el que asumimos esta gran responsabilidad, como es la presidencia del G77+China, plantearles con humildad, pero con la fuerza de nuestras convicciones y el espíritu de nuestros pueblos, 10 tareas fundamentales para el G77+China. Les proponemos que las analicen y que consideren incluirlas en nuestras agendas nacionales e internacionales y en el debate de nuestros pueblos”, indicó a tiempo de presentar las propuestas. “Hermanas y hermanos —complementó— necesitamos construir un mecanismo para el desarrollo integral y la integración de los Estados y pueblos del sur, que incluya las áreas de conocimientos, tecnologías, energía, producción de alimentos, financiamiento, salud y educación, entre nosotros”, señaló el Presidente. El G77+China fue creado el 15 de junio de 1964 en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), en Ginebra. La presidencia, que es el máximo órgano político dentro la estructura organizativa, gira sobre una base regional (entre África, Asia y América Latina y el Caribe) y se mantiene durante un año. 1. Desarrollo integral en equilibrio con los derechos de la Madre Tierra La carrera de enriquecimiento que ha generado el cambio climático afectará principalmente a los países del sur. Del total de costos destinados por los impactos del cambio climático, entre un 75 y un 80% serán asumidos por estos países. Desde el G77 se debe avanzar en forma contundente en la creación de mecanismos que no estén basados en los mercados de carbono y las funciones ambientales de la naturaleza, sino en la complementariedad y solidaridad de los Estados con transparencia de financiamiento, tecnología y desarrollo de capacidades. 2. De la democracia representativa a la participativa y comunitaria Los indígenas, los obreros, campesinos, todos los sectores sociales queremos que se respeten nuestras tradiciones, el pueblo necesita nuevos mecanismos democráticos para cambiar el mundo, pero las democracias meramente electorales son insuficientes para esta nueva demanda participativa. La democracia no es sólo decidir quién nos gobernará durante cinco años, la democracia es participar en el destino de nuestra vida en común, comenzando por los bienes comunes. 3. Los servicios básicos deben ser un derecho humano universal Sin embargo, millones de personas van a dormir cada noche con hambre, millones de personas pasan sed, no cuentan con apoyo médico y se mueren por enfermedades de pobreza y abandono, y es que en el planeta todavía sigue existiendo una realidad insultante y abusiva. Esto se debe a una desigual distribución de los ingresos, pero también a un acceso desigual y discriminador de los servicios básicos. Junto con el reconocimiento de los servicios básicos como un derecho humano, se debe avanzar en la nacionalización de estos servicios, ya que las administraciones privadas marginan a la mayoría de la población. 4. Descolonizar la economía, la cultura, los saberes y el mundo Esta es una indigna herencia colonial del siglo XVI que tiene que erradicarse del mundo entero, cada pueblo tiene el derecho a gobernarse a sí y nadie tiene la autoridad moral ni histórica de invadir territorio ajeno. Mientras exista cualquier colonialismo no habrá paz verdadera. Mientras haya colonialismo no habrá igualdad ni justicia. El colonialismo es la más brutal y arcaica forma de dominación que destruye a la humanidad. El mundo sabe que existen casos no resueltos, como el de las islas Malvinas, la situación de Palestina y el enclaustramiento boliviano. Estos asuntos deben ser resueltos pacíficamente mediante el diálogo. 5. Erradicar el hambre de los países del sur y dar acceso a una salud digna Los países miembros del G77+China deben eliminar los monopolios en la provisión de insumos agrícolas para garantizar la seguridad alimentaria con soberanía. Por eso el Gobierno boliviano propone que cada uno de nuestros países garantice los alimentos básicos y propios que consume su población a partir del fortalecimiento de sus prácticas productivas, culturales, ecológicas así como el intercambio solidario entre pueblos. Esta propuesta también está incluida en la Agenda Patriótica 2025 en favor del Estado Plurinacional de Bolivia. 6. La ciencia y tecnología debe estar al servicio de los pueblos También permite producir alimentos, dar servicios básicos, desarrollar nuevas industrias, tener nuevas fuentes energéticas limpias y accesibles a los pueblos y naciones. Desde el G77+China es necesario consolidar la liberación del conocimiento de la ciencia y la tecnología moderna, al mismo tiempo proteger y fortalecer los saberes, los conocimientos, ciencia y tecnología ancestrales de los pueblos y las naciones indígenas. 7. Construir una nueva arquitectura económica financiera mundial Como alternativa a la profunda crisis del capitalismo tenemos que construir y poner una nueva arquitectura económica y financiera al servicio de los pueblos y las naciones. Esta nueva arquitectura financiera debe sustentarse en la integración, el desarrollo integral en armonía con la Madre Tierra. Debe promover la creación de fondos financieros solidarios y, en beneficio de los pueblos y las naciones, fortalecer las monedas regionales, entre otras medidas. 8. La soberanía sobre los recursos naturales de cada país Es necesario pasar la propiedad de los recursos naturales al Estado en beneficio de los pueblos, para que éstos estén orientados al goce y beneficio de sus pobladores. Ha quedado en evidencia histórica que los pueblos saqueados son pueblos esclavizados por el capital transnacional. Por ello la nacionalización de los recursos naturales es la fuerza poderosa que permite no sólo avanzar con el desarrollo, sino también consolidar la industrialización y la diversificación económica 9. Crear nuevas instituciones internacionales para el pueblo Debemos construir una institucionalidad mundial de los pueblos, de los pobres, de la Madre Tierra. Para alcanzar el vivir bien debemos construir las condiciones institucionales y jurídicas para que los pueblos y países vivan con dignidad y soberanía, sin intervencionismo ni bases militares extranjeras. Es necesario construir una organización mundial para los pueblos y la justicia; para la soberanía de los pueblos y también para la Madre Tierra. 10. Integración complementaria, paz y relaciones internacionales Este club ha dejado a la mayoría de los pueblos del mundo a merced del imperio, del capital, del intervencionismo imperial y la voluntad caprichosa para explotar los recursos naturales de los pueblos. Frente a la arrogancia del poder imperial y de sus aliados, privilegiados, los países del sur debemos unirnos. La unidad permitirá contrarrestar las intervenciones coloniales de saqueo de los recursos económicos y la imposición de la voluntad de unos cuantos sobre la mayoría de los países que persiguen su independencia. |